De gira por la provincia, se presentará en Azul el músico Palo Pandolfo



Después de un año el cantor criollo Palo Pandolfo vuelve al centro de la provincia para consumar tres conciertos en las ciudades de Olavarría, Azul y Tandil. En estas presentaciones Pandolfo subirá a escena acompañado por su guitarra criolla. Repasará todo su repertorio haciendo hincapié en Ritual Criollo, su última placa. También adelantará “Milonguita” y “La misma suerte”, dos de las canciones que formarán parte de un disco que editará el año próximo.

El cantante Palo Pandolfo ofrecerá una serie de conciertos en la zona centro de la provincia de Buenos Aires durante el fin de semana patriótico del 8, 9 y 10 de julio próximos. Las actuaciones tendrán lugar en el pub La Gaviota (Coronel Suárez 2278, Olavarría), el Espacio Cultural La Criba (Bolívar 674, Azul) y el Restaurante La Realidad (Sarmiento 743, Tandil) respectivamente.

En la presentación de Olavarría abrirán el escenario el cantautor azuleño Gastón Torrens (más conocido por ser cantante y guitarrista de La Ira de Tu Madre, y precisamente actuará con el guitarrista de esa banda, Ieie Zelaye) y la Orquesta Muyinga (delicada agrupación de folclores del mundo integrada por Facundo Quiroga, German Samarelli, Diego Espinoza, Luis “Charango” Torres, Tuko Aitala y Fabián Massolo). En Azul los artistas invitados serán el cantautor Gabriel Goyeneche (actualmente en proceso de formación de una nueva agrupación en trío junto a sus hermanos David y Fabián en guitarra y bajo respectivamente) y otra vez Gastón Torrens+Zelaye. Finalmente en Tandil la apertura la realizarán el cantautor local Berna y, por tercera vez Gastón Torrens junto a la guitarra de Zelaye.

 

Acerca de Palo Pandolfo

Palo Pandolfo es un reconocido cantante, guitarrista y compositor porteño que a lo largo de su trayectoria artística cosechó una incuestionable cuota de prestigio. Le dedicó a la música los últimos treinta años de su vida y le aportó al cancionero popular argentino una enorme cantidad de clásicos desde sus grupos más conocidos: Don Cornelio & La Zona, en la década del ´80, y sobre todo con Los Visitantes, en los años ´90.

En 2008 el artista publicó Ritual Criollo, un disco valioso y de canciones profundas con el que recorre planicies acústicas, ritmos folklóricos y latinos y en el que despliega un caudal poético de exquisita inspiración. La placa obtuvo excelentes críticas de parte de los medios especializados y lo reconfirmó como uno de los pilares de la música popular argentina.

Los colores que revisten las canciones de Pandolfo dificultan el encasillamiento: se desplaza con naturalidad por los valsecitos criollos, la cadencia tanguera, la chacarera, el candombe y hasta ritmos como la bossa nova y la cumbia. Y, por supuesto, es un excelente cantante de rock.

Su carrera solista comenzó en 2001, cuando publicó el disco A través de los sueños. Ese trabajo fue publicado en simultáneo con el nacimiento de su primera hija, y a partir de entonces se puede observar en su obra un perfil más intimista y de mayor calidez.

Poco después grabó un segundo disco con una banda propia bautizada La Fuerza Suave, y la placa llevó por nombre Intuición. Debido a la negativa de la discográfica con la que estaba trabajando en aquel entonces, la placa no fue editada oficialmente pero los demos circularon por Internet. En la escucha de esos archivos se hace evidente que, otra vez, los directivos de las discográficas tienen una nula valoración del caudal creativo de los artistas con los que suelen trabajar.

En el año 2004 Pandolfo editó Antojo, un disco con versiones de temas de Charly García, Radiohead, Bowie, Quilapayún, Silvio Rodríguez, Mano Negra y de Don Cornelio y Los Visitantes.

En una nota publicada recientemente en el diario Clarín se dice que “se podrá considerar a Palo Pandolfo un músico maldito condenado a una suerte de under eterno; jamás podrá decirse que no es un artista honesto, incómodo y visceral. Sus más de veinte años de trayectoria sugieren una montaña rusa con picos y pozos, autoboicot y desmesura, genialidad, torpeza y pureza. Desde el soberbio pop y punk rock de Don Cornelio hasta el folclore y el tango de Los Visitantes, desde la tensión entre Yupanqui y Spinetta que domina parte de su obra (esa poética que combina sencillez, profundidad y barroquismo) hasta su carácter interpretativo pasional y desprolijo (que en el vivo es anarquía feroz), Palo Pandolfo parece estar siempre a punto de dar un gran salto”.

En un reportaje de hace poco tiempo, una periodista le preguntaba a Palo Pandolfo qué había aprendido en los veinticinco años de carrera que tiene desde la época de Don Cornelio y la Zona. “Tiene que ver con la hipnosis –respondía el artista-. Lo que estoy tratando todo el tiempo de generar es llegar al otro sin dominarlo, sin hipnotizarlo. Desde arriba del escenario vos estás ahí, tenés un poder terrible y se genera la hipnosis; hay una cuestión de dominación. Estoy tratando de aprender eso, como llegar al otro y tocarlo desde el alma y que el chabón, en sí mismo, dispare su propia energía. ¿Dónde está el quiebre de la hipnosis? Está, a veces, en equivocarse, en mostrar el lado flaco, en humanizarte mal arriba del escenario; en salir del rol dominante y tipo chauvinista del demagogo. El problema de eso no es social ni psicológico, sino espiritual, por eso es muy delicado. Porque lo que me preocupa es la dominación espiritual”.